lunes, septiembre 24

Viaje de ida...

Empiezo este viaje afirmando lo siguiente:

...Cuando digo que me voy, me voy!

Hablando con un gran amigo, en aquellas conversaciones para arreglar el mundo, nuestro mundo, trataba de eludir la culpa de no haber realizado ya tantos sueños que van quedando en el camino, pero algo dentro de mi naturaleza aventurera me dice que todo tiene un sentido y una explicación...

Muchas miradas a un mismo problema me llevan a sostener que los mal llamados errores son simples decisiones difíciles de sostener por falta de fe, porque todo lo bueno y malo que hacemos, nos lleva al resultado final, al correcto al que nosotros elegimos, ese del cual tenemos libre albedrío...

Es difícil para nuestra mente humana comprender los caminos de Dios y su propósito, e incluso comprender nuestros sentimientos y motivaciones, aún más difícil comprender la de otros, pero aunque nuestros ojos no pueden ver el gran organigrama dentro de nuestra cabeza, el corazón nos guía y debemos hacerle caso para seguir con consecuencia la ruta que estamos esgrimiendo, el resultado final...

Seguramente al igual que muchas personas el paso del tiempo y la capacidad de pensar las cosas, nos hacen cuestionar que hemos desviado el rumbo, pero no veo otro camino para llegar a mis decisiones, que el que tomé, somos parte de un medio que se auto-presiona a los resultados y no al contenido, se que mi vida tiene un gran contenido y lo veo en las personas que me acompañan en este viaje...

yo elijo tener fe...